En una decisión que ha generado polémica, el restaurante “La Yarda Food Station”, ubicado en el Food Park de Monclova, Coahuila, ha optado por no poner música del popular cantante “Peso Pluma”. En una foto compartida en redes sociales, se puede apreciar un mensaje en las pantallas que reza “NO PONGO PESO PLUMA”.

Esta medida ha sido tomada debido a que la música de corridos tumbados asociada al cantante atrae a un público que, según los propietarios, puede generar problemas y peleas en el establecimiento.

La decisión del restaurante se basa en la preocupación por el orden público y la seguridad de sus clientes. Según argumentan, este tipo de música puede crear un ambiente propenso a conflictos y altercados. Además, señalan que no es del agrado de muchas personas que acuden al lugar en busca de un ambiente tranquilo y agradable para disfrutar de su comida.

No solo se trata de una cuestión de seguridad, sino también de preferencia del público. La música de “Peso Pluma” ha sido objeto de críticas masivas debido a los mensajes que transmiten, que algunos consideran que incitan al consumo de drogas y glorifican la violencia. En consecuencia, el restaurante ha optado por respetar los gustos y preferencias de sus comensales, ofreciendo un ambiente musical diferente y más acorde con sus expectativas.

La decisión de “La Yarda Food Station” ha generado reacciones encontradas en las redes sociales. Mientras algunos usuarios aplauden la postura del restaurante, argumentando que es importante garantizar la seguridad y el confort de los clientes, otros consideran que se trata de una medida discriminatoria y limitante en cuanto a la diversidad musical.

Cabe resaltar que la elección de la música en establecimientos comerciales es una decisión que queda a criterio de cada propietario. En este caso particular, el restaurante ha optado por excluir la música de “Peso Pluma” en aras de mantener un ambiente pacífico y satisfacer las preferencias de sus clientes. Sin embargo, la polémica sigue abierta en torno a la libertad de expresión musical y los límites de la misma en lugares públicos.

En última instancia, el restaurante busca proporcionar a sus clientes una experiencia placentera y segura. La decisión de no poner música de “Peso Pluma” es un intento por preservar un ambiente adecuado y evitar situaciones que puedan afectar negativamente la experiencia de los comensales. En un contexto en el que la música puede generar emociones y reacciones diversas, es importante buscar un equilibrio que satisfaga a todos los implicados.