El gran referente de la birria y pitayas en Guadalajara, es sin duda las “9 Esquinas”. Pero ¿Te has preguntado cuál es el origen de su nombre?.

Existen varias historias de Las Nueve Esquinas de Guadalajara, pero hay una que sobresale más que las otras.

Se dice que hace mucho tiempo, cuando aun no había calles en el lugar, la ciudad tenía un declive natural del poniente de la ciudad hacia la calzada independencia, en tiempos de lluvia se formaban grandes arroyos que corrían directamente hacia ese lugar, formando una especie de manantial, mismo que después desembocaba a la calzada independencia.

Asimismo, estos arroyos fueron dejando una especie de triángulos en el terreno y esas marcas parecían 9 caminos, por eso motivo se le empezó a nombrar las 9 esquinas.

De acuerdo con Crónica Jalisco, el investigador Samuel Gómez, explicó que a finales de 1800 nacen “Las Nueve Esquinas”, que eran prácticamente los linderos con Mexicaltzingo que conectaba a Guadalajara con el puente de Las Damas.

Este sitio eran las orillas de la ciudad, era el poblado más próximo hacia Mexicaltzingo, uno de los pueblos indígenas más antiguos. En este sentido, la zona comenzó a tener vida con la instalación del comercio.