Fue a mediados del año 2014 cuando los jaliscienses comenzamos a ver el inicio de la construcción que cambiaría la imagen urbana de toda la ciudad. Desde Zapopan hasta Tlaquepaque, sin pensar que las obras mantendrían paralizada la vialidad de la metrópoli durante varios años.

La administración del entonces gobernador de Jalisco, Aristóteles Sándoval en coordinación con el presidente Enrique Peña Nieto, fueron los encargados de dar inicio a esta obra. Sin embargo, pocos saben que este proyecto se había planeado desde 1993 sin lograrse concretar por los gobiernos de ese entonces.

Tras el inicio de las obras de la Línea 2 que sería la extensión de la Línea 1 hacia el oriente de la ciudad (Parque Revolución-Tetlán) en el año de 1992. Se había planeado estratégicamente otro tramo similar que conectaría hacia el poniente de la ciudad (Ávila Camacho-Zapopan) mediante un paso elevado, tal como lo conocemos actualmente.

Este fue el primer proyecto que se presentó oficialmente como la Línea 3 del Tren Ligero cuya magna obra sería finalizada poco tiempo después de la Línea 2 para concluir con la modernización integral del sistema de transporte en la ciudad.

El proyecto fue presentado por el entonces gobernador de Jalisco, Carlos Rivera Aceves y se contemplaba la ruta desde el centro de Zapopan hasta la Glorieta de La Normal. Originalmente la Línea 3 sería pequeña y sin la intención de conectar con Tlaquepaque.

Sin embargo, los esfuerzos fueron destinados para la conclusión de la Línea 2, mientras que la Línea 3 quedó en el olvido y no fue retomado por otros mandatarios hasta el sexenio de Aristóteles Sandoval quien prometió entregar este sistema transporte al final de su mandato.

Finalmente la Línea 3 fue inaugurada por el presidente Andrés Manuel López Obrador en compañía del gobernador Enrique Alfaro en la segunda mitad del 2020, tras 6 años de espera desde el inicio de las obras.

Ahora queda anunciada de manera oficial la Línea 4 con destino a Tlajomulco. ¿En cuánto tiempo veremos finalizada esa obra?