De acuerdo con el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, el 25 de enero los niños podrán regresar a clases presenciales, además serían si las condiciones lo permiten y la Mesa de Salud lo autoriza.

Asimismo, el regreso a las aulas serán opcionales, es decir, los padres de familia podrán decidir si sus hijos asistirán o seguirán de manera virtual.

“Queremos brincar las primeras tres semanas de enero que son las de más frío, para evitar esto como un factor de riesgo”, aseguró Alfaro.

Para ello, el 8 de enero se evaluará a los maestros para saber quiénes estarán en condiciones de dar clases presenciales y no son vulnerables.

Mientras que el 11 de enero habrá un corte de caja para analizar si las condiciones permitirán el regreso presencial.

“La realidad nos dice que han muerto 49 maestros y 47 médicos. Aún sin ir a clases presenciales están en un ambiente de riesgo comparado con los médicos. Si hacemos las cosas bien, aún en los lugares de mayor riesgo, podemos ir adelante”, expresó el gobernador.

Si la mesa lo autoriza, desde ese día comenzará la sanitización en las aulas. Además, el gobernador anunció que, una vez que llegue la vacuna contra el COVID-19 a Jalisco, los maestros serán población prioritaria para aplicársela.

La logística de regreso, como la cantidad de alumnos, las jornadas, entre otros, serán por el riesgo de contagios de cada municipio.

Así, los que se encuentran con “riesgo” podrán tener a 100% de su matrícula en clases, de lunes a jueves. Mientras que los que se encuentran en “riesgo alto”, solo podrán estar la mitad de los alumnos dos días a la semana.

Además, cuando en una sección o área de algún plantel se detecten dos o más casos se suspenderán las actividades en ese lugar, desde dos semanas hasta la solución al brote.

Con información de Informador