Cada 23 de Mayo festejamos alegremente el Día del Estudiante, en todas las escuelas del país. Sin embargo, muy poco se sabe acerca del origen de este día que cada año celebramos.

El “Día del Estudiante” nació en honor a un grupo de estudiantes que fueron brutalmente agredidos por parte de la policía capitalina, el día 23 de Mayo de 1929.

Estos actos de agresión ocurrieron dentro de las instalaciones de la Universidad Nacional de México, en donde los estudiantes se manifestaban para obtener la autonomía de la máxima casa de estudios; por lo que después de estos hechos, los estudiantes reclamaron que se recordara ese día en honor a los que fueron agredidos, y que la Plaza de Santo Domingo en la Ciudad de México fuera llamada la Plaza 23 de Mayo o del Estudiante.

Después de esa lucha estudiantil, se logró la autonomía de la universidad y posteriormente fue llamada Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Actualmente este día hace un recordatorio a los estudiantes, para una búsqueda de educación más abierta y participativa. Sin embargo, es el día en el que se ausentan de las clases, y se relajan las actividades escolares, olvidando completamente el objetivo inicial.