El cubrebocas está elaborado a partir de PVC flexible y cuenta con dos filtros intercambiables que retienen hasta 95 por ciento de las partículas aéreas.

Estudiantes del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (Iteso) en Guadalajara crearon “Brankia”, una mascarilla transparente que permite que se pueda ver la boca de la persona y así facilitar que personas con discapacidad auditiva puedan leer los labios.

Desde este mes de diciembre los primeros cubrebocas que forman parte del piloto son probados por los estudiantes que se gradúan en el Iteso con todas las medidas sanitarias y en grupos reducidos.

A partir de enero de 2021 estiman que comience la venta al público de un paquete que incluye el cubrebocas Brankia, dos portafiltros, dos bandas elásticas y tres pares de filtros.

Aunque no se ha definido el precio de venta de esta mascarilla y los accesorios, en julio pasado el profesor Miguel Huerta Gutiérrez que estuvo a cargo del equipo de trabajo, dijo en entrevistas que podría costar un poco menos de 100 pesos.

“Nuestra apuesta es que al público salga en 50 pesos, sin que esto sea un hecho y depende del proceso. Pretendemos que las empresas que se reactiven con esto tengan una utilidad, pero que no haya un abuso” señaló el académico.

“Creemos que con eso ya habría utilidad. Incluso, si lo dejamos por debajo de 100 pesos sigue siendo muy atractivo en comparación con lo que hay en mercado”, agregó.

Con información de Informador