Nuestra ciudad sin duda es un mar de costumbres, alguna se han mantenido, otras se han modificado o simplemente desaparecido.

Aquí, algunas costumbre de antaño en nuestra sociedad tapatía.

• El domingo nadie madrugaba
• El jefe de la casa leía su periódico la Gaceta de Guadalajara
• Las Tapatías se alistaban para ir a la misa de la Catedral, al templo de la Soledad o el Sagrario.
  Después se iban a dar vueltas al interior de los portales y se pasaban a comer algún aperitivo a restaurantes de la zona.

• Existo el oficio de “Las Lloronas” o “Plañideras”, mujeres que eran contratadas por la aristocracia para acompañar con sus llantos a sus difuntos, ya que estaba prácticamente prohibido y de mal gusto a la gente pudiente y adinerada llorar frente a los pobres.

• Se tenía la costumbre de retratar a los difuntos.
• La leche bronca, además de venderse en depósitos caseros, era ofrecida y repartida a caballo.

• Para finales del siglo XIX, en las fechas de Semana Santa, los negocios cerraban sus puertas hasta el lunes de pascua, no había fiestas y las personas tomaban una actitud seria y tranquila.
  En el Viernes Santo no se veían coches por las calles, no circulaban las carretillas , ni salían los animales como los caballos del lechero.

Con información de Sucedió en Guadalajara