En cualquier parte del mundo es fácil reconocer a un tapatío y es que tenemos nuestro propio encanto.
Aquí detallamos parte de nuestra personalidad:
Amantes de nuestros platillo típicos : Después de 15 minutos de conversación, empezamos a hablar de comida. Y queremos siempre llevar a nuestras amistades foráneas a las tortas ahogadas.
Somos futboleros: La pasión por el futbol es extrema, la mayoría prefiere al equipo Chivas o al Atlas y muchos portan su camiseta en días de partidos. Si no van al estadio, acostumbran a tomar cervezas y comer botanas viéndolos por televisión en compañía de familiares y amigos.
El tapatío es religioso: Su manera de ver la vida se sustenta en la idea de que hay un orden y una justicia divina.
Somos desconfiados y reservados: No son muy dados a contar problemas personales a no ser en familia.
Nos encanta el shopping: Sobre todo ir a los tianguis como el Baratillo para comprar ropa de buena calidad a bajo costo.
Nos encanta las fiestas: Al tapatío le gustan las reuniones sociales, las fiestas, y es además un excelente anfitrión. Los grandes festejos le dan vida a nuestra ciudad.
Carácter definido: Tenemos una muy peculiar tendencia a mostrar reacciones extremas. Cuando se trata de alegría o coraje, el tapatío no conoce límites. Si bien es mesurado y controlado, cuando estalla, estalla.
Ojos Tapatíos: Un rasgo predominante en la mayoría de los jaliscienses son sus grandes ojos de mirada expresiva que han sido elogiados durante décadas.
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Somos muy bromistas y dicharacheros
Somos muy alegres y amables amigables
Yo viaje muchos años y dónde quiera esos eran los comentarios
Lastimosamente ya hay mucha gente de afuera y se está perdiendo nuestra identidad