El boxeador jalisciense Saúl “El Canelo” Álvarez se ha destacado en los últimos años por ser el pugilista mexicano más cotizado del que se haya tenido registro hasta el momento. Sus peleas son sinónimo de éxito por la gran audiencia que reúne en México y Estados Unidos, lo que se traduce en un gran negocio deportivo.

Recientemente firmó el mejor contrato de la historia en el mundo deportivo por un valor de 365 millones de dólares que ganará durante los próximos cinco años en el momento cúspide de su carrera boxística. Sin embargo, hace 13 años su realidad era completamente distinta cuando cobró 800 pesos en su primer pelea profesional.

Fue en Octubre 2005 cuando un joven Canelo de apenas 15 años de edad debutaba como una fuerte promesa para el boxeo mexicano. Su nombre poco a poco fue ganando terreno hasta que llegó a manos de los grandes promotores del mundo del boxeo.

“El boxeo lo empecé porque me gusta, porque amo el boxeo, y viene de la mano el negocio”, dijo Canelo. “Cuando debuté, gané 800 pesos, y no me importó. Me sacrificaba dando el peso desde niño, ganando nada, pero lo que me importa es el boxeo, amo el boxeo, amo el boxeo, y después empecé a vivir de él, vino de la mano el negocio”. Comentó el jalisciense.

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